Marta Espinós, pianista: “Un concierto de música contemporánea obliga a abrir la mente y los tímpanos”

Por Romu Soler (11/10/2106)
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La pianista de Xàbia Marta Espinós regresa este miércoles a Dénia para presentar un atractivo concierto inspirado en Cervantes. Estrenada el pasado abril en la Biblioteca Nacional de España, esta nueva propuesta de Espinós ya ha podido ser disfrutada en destacados auditorios del estado, recibiendo elogios de la crítica especializada que ha destacado el virtuosismo de la pianista, su apuesta por acercar a un público amplio la música contemporánea a través de un concierto comentado o la audacia de adentrarse en el universo literario cervantino a través de las obras, varias de ellas creadas expresamente para este concierto, de siete compositores actuales.

-“Entre las obras que interpreto en esta propuesta sobre Cervantes existe gran diversidad estilística, de lenguaje y de concepción sonora, lo que sin duda enriquece y beneficia al proyecto”

–“Resulta increíble que para el Año Cervantes no se haya movilizado más y mejor el flujo de patrocinios privados y públicos. Esto es una radiografía indiscutible de las prioridades culturales de este país”

-“Los comentarios son un elemento que  mejora muchísimo la percepción y la comunicación con la audiencia”

-“El año que viene realizaré mi primera colaboración con la Orquesta de Radiotelevisión Española, con el director y sabio José Luis Temes a la batuta”.

-¿En qué consiste el concierto que presentas en Dénia “Estremada armonía: Cervantes en el piano español contemporáneo”?

-Se trata de un proyecto de repertorio contemporáneo para piano, inspirado en la figura de Miguel de Cervantes, que reúne obras de siete compositores españoles. A cuatro de ellos he tenido el placer de realizarles encargos: a Tomás Marco, Benet Casablancas, Carlos Cruz de Castro y Mercedes Zavala. Por primera vez para mí, he podido experimentar el proceso esperar el parto de la criatura, trabajarla con el compositor, y hacerla sonar por primera vez ante un público. Paralelamente también forman parte del programa obras preexistentes de los compositores Manuel Angulo y José Zárate, también de inspiración cervantina, así como una obra del valenciano César Cano. Ésta última se trata de un encargo de CulturArts, que tuve la oportunidad de estrenar en el Palau de la Música de València durante la pasada edición del Festival Internacional de Música Contemporánea Ensems.

-Musicalmente, las creaciones de estos 7 compositores que se acercan a Cervantes y sus obra, ¿presentan similitudes o hay grandes diferencias entre ellas?

-Son bastante diferentes entre sí, lo que sin duda enriquece y beneficia al proyecto. Para empezar, hay representado cierto abanico generacional. La obra más “antigua” es de 1987, y de ahí saltamos al siglo XXI, con cinco obras recién salidas del horno para conmemorar la efeméride cervantina.  Y sin duda también existe gran diversidad estilística, de lenguaje, de aproximación al instrumento y de concepción sonora. Sin embargo, todos han sabido crear un vínculo con la obra de Cervantes, algunos de manera más conceptual, otros más explícita.

-¿Los autores se han inspirado en una obra concreta de Cervantes o en varias? ¿Qué visión da el recital de Cervantes y su obra?

-Muchas de las referencias se concentran en El Quijote, aunque no todas. Los puntos de partida que han tomado los compositores como inspiración son diversos: el paisaje manchego, la psique y aventuras concretas de Alonso Quijano y Sancho Panza, regiones geográficas imaginarias, retratos característicos cervantinos que van de lo burlesco a lo melancólico, o incluso referencias de otros literatos y compositores que con anterioridad han evocado algún aspecto del ingenioso hidalgo.

-Por cierto, ¿por qué has titulado el recital el título de “Estremada armonía”?

Cervantes utiliza, casi sin excepción, el adjetivo “estremada” para definir la voz de algún personaje de sus obras que se pone a cantar. Con ello quiere significar que se trata de una voz afinada, entonada en extremo. Esto ocurre en toda su obra: El Quijote, Los trabajos de Persiles y Sigismunda, La Galatea… La RAE define “extremado” como algo “Sumamente bueno o malo en su género” y este es, sin duda, el uso que le da Cervantes al describir una voz “extremadamente buena”. Pero también significa “exagerado, excesivo, extremo”, y me gustó la noción de una “armonía extrema”, que puede describir de manera muy sugerente la composición contemporánea, independientemente de estéticas concretas. Me pareció bello igualmente mantener la “s” y no substituirla por la “x” de la palabra actual tras su evolución fonética. Por otra parte, y a pesar de la forma arcaica de la palabra “harmonía”, ésta fue utilizada por Cervantes sin hache.

-¿Qué le dirías a la gente que quizá no se atreve a ir al concierto por tratarse de música contemporánea?

-Le diría lo que dice Sancho: que “donde hay música no puede haber cosa mala”. Que al igual que el arte plástico contemporáneo nos obliga a abrir la mente en lo visual (y conceptual), asistir a un concierto donde se va a interpretar en directo música compuesta recientemente nos va a obligar a “abrir los tímpanos”. Que vengan a escuchar sin formarse un prejuicio, sin juzgar ni comparar con otras músicas que ya conozcan. Es una oportunidad de descubrir un lenguaje sonoro nuevo, que al principio puede parecer vacío o incomprensible, pero que si no nos empeñamos en intentar “comprender”, seguramente lleguemos a disfrutarlo.

Quizá piense alguien: “¿y por qué música contemporánea?” Pues he querido implicar a creadores vivos porque la mayor parte del tiempo los músicos “clásicos” tenemos sobre el atril partituras de compositores con quien no existe posibilidad alguna de interactuar (sin entrar en recursos paranormales!). Me interesaba plasmar una visión sonora sobre Cervantes desde la más estricta actualidad.

-En este concierto sobre Cervantes, y como es habitual en tu trayectoria, no sólo eres la intérprete musical, sino que eres creadora y promotora de este complejo proyecto a través de la empresa de la que eres codirectora artística. ¿Cuáles han sido las premisas y las dificultades para montarlo?

-Efectivamente, desde Lo Otro hemos impulsado este proyecto en todas sus fases, aunque esta parte será más visible cuando aparezca el proyecto cristalizado en una grabación discográfica. A través de Lo Otro hemos gestionado aspectos tan importantes como la búsqueda de patrocinios, como los encargos realizados a los compositores, que han sido financiados por Acción Cultural Española. Otras ayudas (aún no confirmadas oficialmente) están en camino y estarán destinadas a la producción de un CD, pero después de un esfuerzo absolutamente desmesurado. A pesar de ser un proyecto incluido en la Programación Oficial del IV Centenario (como otros muchos de muy diversa índole), resulta increíble que durante este Año Cervantes no se haya movilizado más y mejor el flujo de patrocinios privados, por no hablar de los públicos. El hecho de que la lamentable situación política de estancamiento afecte tan negativamente una efeméride de primera magnitud como ésta, que debería de ser intocable, es una radiografía indiscutible de las prioridades culturales de este país. Y no sé si lo más triste de todo es que, probablemente, no le extrañaría ni al propio Cervantes…

-¿Cuándo estrenaste este concierto y por dónde ha rodado?

-Las obras encargadas se estrenaron en un concierto la Biblioteca Nacional de España, en su impresionante Salón de Lectura, justo la noche del 22 de abril, cuando se cumplían los 400 años de la muerte de Miguel de Cervantes. Fue emocionante por su carga simbólica: esa noche, en el templo de la bibliofilia y con prácticamente todos los compositores escuchando… irrepetible. Después ha sonado en la Sala Berlanga de la Fundación SGAE (Madrid), en el Palau de la Música de València dentro de EnsemsFestival Internacional de Música Contemporánea, y más recientemente en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid). Después del concierto de este miércoles en Dénia, recordando el paso por aquí del escritor tras su liberación de su cautiverio en Argel, los próximos conciertos cervantinos serán en la Casa Museo de Valladolid donde vivió durante algunos años (16 de noviembre) y en el Teatro Campos Elíseos de Bilbao, de nuevo en un ciclo de la Fundación SGAE (18 de noviembre).

-Ya hace dos años de la última vez que te entrevistamos con motivo del concierto que ofreciste en Dénia en el Festival Dénia Clàssics, “El humor en la música clásica”. ¿Cuál ha sido tu trayectoria y evolución durante este último periodo?

-Uf… ¡es difícil resumir! Me he embarcado en proyectos muy diferentes, pero todos con una dosis de transversalidad evidente. En Sorolla: Un imaginario musical se establecían conexiones entre el repertorio de compositores coetáneos al pintor y las temáticas que le obsesionaron. Fue originalmente un encargo de la Fundación Joaquín Achúcarro para la clausura de la exposición Sorolla and America en el Meadows Museum (Dallas) y en el San Diego Museum of Art, y también sonó en San Antonio (Texas), el Museo Sorolla de Madrid, Zaragoza, Xàbia…

Como comisaria musical, una faceta que cada vez desarrollo más, destaca la dirección del proyecto ¿A qué suena Goya en Madrid?, un comisariado musical realizado para la exposición Goya en Madrid del Museo Nacional del Prado. En ella el visitante se convirtió también en oyente, por primera vez en el museo, al poder escuchar música desde varios dispositivos electrónicos ubicados en una de las salas de la exposición.

El concierto Piano Místico ofrece una visión contemporánea alrededor de la figura de Teresa de Jesús en el V Centenario de su nacimiento. Es un recital de temática místico-diabólica, que pretende sugerir una metáfora sonora del camino espiritual, con sus luces pero también las sombras de la tentación.

Por no hablar de los maridajes musicales, un formato nuevo que disfruto muchísimo, donde la música participa en una cata de vinos como otro elemento más a disfrutar…

-Efectivamente, continuas plasmando en los recitales tu visión multidisciplinar de la música, como acabas de comentar, escogiendo como tema a pintores como Goya y Sorolla o a escritores como Santa Teresa o Cervantes. ¿Cómo está asimilando el público esta apuesta?

-Es una combinación ganadora, si se realiza con cabeza e imaginación. El público puede no conocer el repertorio y sentirse desorientado, pero si le ofreces una temática que le resulta familiar, es un anzuelo y una referencia: se dispara la predisposición para escuchar de otra manera. Y por supuesto, los comentarios son otro elemento que ayuda, y mejora muchísimo la percepción y la comunicación con la audiencia.

-¿Puedes anticiparnos proyectos futuros?

-En breve, la grabación discográfica de este proyecto cervantino. Y para el año que viene, mi primera colaboración con la Orquesta de Radiotelevisión Española, con el director y sabio José Luis Temes a la batuta. Realizaremos el estreno en tiempos modernos del que se considera el primer concierto para piano y orquesta español, obra del compositor Jacinto Codina. No hace falta decir que mi ilusión se debe a este debut con la ORTVE, pero también al hecho de que sea con un proyecto tan especial.

-Últimamente  hemos podido disfrutar de tus recitales en La Marina: como hemos comentado en 2014 estuviste en Dénia, en 2015 presentaste tu concierto sobre Sorolla en Xàbia y esta semana de nuevo a Dénia. ¿Sientes que empieza a ser reconocido tu trabajo también en tu comarca?

-¡Por supuesto! Aunque me gustaría poder tocar aquí todos y cada uno de los proyectos que realizo… ¡aunque quizá sea pedir demasiado!

 

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